En el carajo

Desde el carajo ya se ve nuevamente tierra. Nos vamos acercando al reino de los bestiarios marinos, alli donde las sirenas bailan funky con Neptuno y el Kraken se harta de barritas de merluza Pescanova. Nos ha puesto sobre la pista el grumete con galones Fede, conoce a un constructor ratero que está preparando algo muy especial para el concurso y que, asegura, nos recibirá de mejor grado que en Isla Radical. De hecho nos estaba esperando. Nada más arrojar el ancla sale a recibirnos  con su chalupa-rat, un deslustrado bote adornado a conciencia con mocos de chapapote,  grasientos jirones de velamen y plumas de gaviota.

Fede estaba en lo cierto, Alvarito es un fuera de serie, como lo es su bestial interpretación de una Sanglas con ballestas de Seat Fura. Está en ello (entre otras cosas  tiene que acoplarle todavía  un turbo)  pero va teniendo una pinta estupenda. El listón va ganando en altura. Cuando la acabe la dará el toque final sumergiéndola en el reino de los bestiarios marinos, para que se oxide a gusto rodeada de los suyos. Seguro que Neptuno ya  la está esperando para darse un rulo con las sirenas.